El canal hialoideo es un conducto transparente útil en las etapas iniciales de formación del cristalino, que cruza el humor vítreo de lado a lado, desde su origen en el área retiniana del disco óptico (papila óptica) hasta el propio cristalino.
El significado etimológico de «conducto hialoideo» es literalmente «canal vidrioso«, y deriva del griego.
Gracias a esta estructura, durante las primeras semanas de gestación, el feto obtiene una prolongación desde la arteria central de la retina que llamamos arteria hialoidea hasta llegar al cristalino, donde se suministra sangre para que comience su desarrollo.
Recordemos que el cristalino es fundamental para el desarrollo visual sin complicaciones como la miopía
En cuanto a la forma, es más ancho en los laterales y más estrecho en el centro, por lo que el líquido que pasa a través se acelera ligeramente cuando lo atraviesa y vuelve a su velocidad anterior cuando se aproxima al cristalino, cerca del final.
Se encuentra integrado en la cámara posterior del ojo gracias a una membrana que lo recubre, permitiendo que coexista dentro del humor vítreo sin interactuar con él.
En el momento en el que el cristalino ha completado su proceso de desarrollo, la arteria comienza a replegarse por medio de vasos linfáticos que limpian el conducto, dejando tras ellos tan sólo un canal transparente y vacío en el medio del ojo.
Complicaciones del Canal Hialoideo
Pueden quedan restos de la arteria hialoidea cerca del disco óptico, lo que puede provocar diversos tipos de miodesopsias y alteraciones visuales leves.
Existe la posibilidad de que parte o todo el canal se rompa y quede colgando, moviéndose con cierta libertad mientras hacemos movimientos con nuestros ojos, son las llamadas «moscas volantes», que deben ser translúcidas.
Cambios en la forma, estructura, tamaño, color y cantidad pueden indicar una diferencia con respecto al estado anterior, por lo que conviene una revisión oftalmológica con un especialista para descartar otras posiblidades.
Función en los adultos
Parece no poseer función alguna en la madurez visual, por lo que se considera un vestigio de la evolución de las estructuras del ojo.
Es una de las pocas zonas del cuerpo que deja «pruebas» de su constitución original, la cicatriz que deja en el cristalino es muy pequeña, pero puede verse en una preparación histológica.
Al lugar donde aparece esa marca se denomina punto de Mittendorf.
Hay casos donde el canal hialoideo queda en su estado original y no se retrae, conservando su color blanquecino, observable en una exploración oftalmológica.
En algunas teorías se daba al canal hialoideo propiedades elásticas o químicas para alterar la composición y volumen del cristalino, éstas han sido desmentidas por la introducción de nuevas técnicas de diagnostico e imagen como la ecografía de cristalino, demostrando la poca relación con el cambio de volumen del mismo.
Acerca de Jules Germain Cloquet
Jules Germain Cloquet (1790 – 1883) era un médico francés que ejerció en Paris.
Su familia contaba con varios miembros ejerciendo de manera profesional la medicina simultáneamente, por lo que suponemos que los apoyos para seguir adelante con su formación profesional fueron altos.
Era un cirujano reconocido por su habilidad en el tratamiento de hernias, además describió diversos hallazgos anatómicos como la arteria hialoidea embrionaria, que pasará a la posteridad como el canal de Cloquet.
Además inventó instrumentos quirúrgicos de gran calidad e innovación para las técnicas de la época, entre ellos destacan una pinza para la faringe y otra para la tensión arterial.
Además escribió una obra sobre la anatomía del hombre con miles de ilustraciones, si te interesa adquirirlo, actualmente está agotado en el libro físico, pero existe una versión ebook que puedes comprar aquí, cuidado que es sólo el primero de una serie de volúmenes.