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La acomodación del cristalino del ojo es el tema más complejo que existe a nivel físico y fisiológico. Pero como somos los mejores (porque si has llegado hasta esté artículo en la décima página de Google, definitivamente lo eres), vamos a explicarlo de manera sencilla.
[Para los amigos de las mates os dejo esa parte al final del artículo, así los demás pueden seguir leyendo]
Hay quien lo define como la capacidad de enfocar objetos cercanos, pero es menos exacto al no hacer referencia a algo que esté a dos o tres metros de distancia, donde también es necesario acomodar y que podría no considerarse «cerca».
La acomodación máxima se conoce como «amplitud de acomodación«, se suelen tener unas 18 dioptrías cuando somos niños y vamos restando de esa cantidad a lo largo de la vida hasta que llegamos a los 55 años y perdemos la práctica totalidad, a razón de una dioptría cada tres años.
Esto, que parece obvio, implica que a los 40 años nos quedamos con menos de 5 Dioptrías de acomodación, provocando la presbicia o vista cansada.
¿Cómo se usa la acomodación del ojo?
La explicación fisiológica de la acomodación, se basa en un incremento del espesor central de la lente del cristalino y un cambio en su curvatura.
Gracias a la contracción del músculo ciliar la potencia del cristalino puede ser modificada, tanto positiva como negativamente, dando lugar a los desenfoques y efectos secundarios de los mismos.
La amplitud de acomodación de la que hemos hablado con anterioridad, es un mecanismo para desarrollar potencia en un momento determinado, pero es necesario control y resistencia para poder mantener el foco en ese punto.
Aproximadamente, la mitad de la amplitud de acomodación es la que se puede usar para enfocar, mientras que la otra mitad sirve para mantener la forma del cristalino en su sitio sin moverse.
Siguiendo con el ejemplo anterior, una persona con 40 años y 5 dioptrías de amplitud de acomodación, tendrá disponibles 2.5 Dioptrías para el enfoque de cerca, por lo que verá bien a 40 centímetros.
Es posible que este paciente, comience a estar incómodo al ponerse el teléfono móvil demasiado cerca y empiece a alejarlo de manera paulatina, para evitar el sobreesfuerzo.
Para acabar de rematar, en ocasiones estos pacientes acaban usando gafas premontadas que no tienen ni su graduación ni sus parámetros personalizados, puedes encontrar un artículo acerca de las gafas premontadas en la web tuoptometrista del colegio de ópticos de andalucía.
Reflejo de acomodación
El reflejo acomodativo es un acto automático, un movimiento de respuesta corporal ante la aproximación de un estímulo u objeto que se encuentra en trayectoria de un objeto que se acerca con el fin de permite ajustar la nitidez de la imagen sobre la retina.
Este proceso comprende el uso de la llamada tríada de la acomodación, un pack de respuesta conjunta preparada para poner en marcha de forma simultánea, creando un efecto de contingencia visual para la imagen del objeto fijado:
- Vergencias fusionales (Convergencia).
- Acomodación (cambios de potencia y forma en el cristalino).
- Ajuste del tamaño de la pupila.
Mediante el modelo simple que nos ofrece la óptica geométrica sabemos que un objeto que se acerca a un sistema similar a un ojo se va volviendo borroso en la retina y genera un estímulo de enfoque que compensar como respuesta, así se activan los mecanismos de acomodación para poder llevar esa imagen al punto correcto del fondo del ojo y resolver el problema.
La acomodación ocurre cuando los músculos ciliares en el ojo cambian la forma del cristalino para enfocar objetos a diferentes distancias.
La convergencia es la capacidad del ojo para meterse hacia dentro siguiendo el estímulo de un objeto que se acerca, de manera simultánea y coordinada con ambos ojos.
Este proceso es importante para que podamos ver con claridad objetos a diferentes distancias, desde objetos cercanos hasta objetos lejanos. Con el tiempo, la capacidad de acomodación puede disminuir debido a la presbicia o a otras afecciones oculares, lo que puede hacer que la visión sea borrosa a ciertas distancias.
El ajuste en el tamaño de la pupila es un mecanismo de ajuste fino que permite que la imagen no se sature al aumentar la cantidad de luz que llega por unidad de área con el aumento de potencia de la acomodación.
¿Se puede entrenar la acomodación del cristalino?
Sí, la respuesta corta es que mediante la terapia visual se pueden hacer ejercicios específicos que trabajan la musculatura y podrían mejorar la acomodación.
La respuesta larga requiere de una explicación profunda de cómo funciona el ojo y saber que aunque trabajemos una parte del ojo en concreto por el beneficio que nos puede aportar, podemos provocar un desequilibrio en otra parte o perder todo el trabajo más adelante si no se han trabajado con un profesional.
Por ello la terapia visual se realiza bajo supervisión, con un seguimiento estricto y contínuo durante periodos de tiempo largos, que además se suelen componer de una fase de entrenamiento, otro mejoría y una última de mantenimiento para hacer lo más permanentes posibles los resultados.
Agarraos que viene el planteamiento matemático.
El ojo promedio tiene una potencia total de 60 dioptrías:
- 42 provienen de la córnea y son «fijas«.
- Aproximadamente 18 o 20 del cristalino y son «variables«.
El ojo ideal mide 23.5mm de longitud axial, lo cual nos deja así simplificando, que una córnea de 42 dioptrías ya es suficiente para enfocar un objeto lejano, no hace falta el cristalino.
Pero, sin el cristalino no podríamos enfocar de cerca, por lo que usamos la potencia que viene del cristalino para leer, escribir y todo lo que no esté «lejos».
Y aún así no es tan simple, empezamos a usar el cristalino cada vez que ponemos nuestro foco en distancias desde unos 5 metros hasta la punta de nuestra nariz, que dependiendo de cada uno, irá desde un par de centímetros a como mucho 9cm(🤥, que es la nariz más larga del mundo).
¿Recuerdas las fracciones que enseñan en el colegio?
El concepto de lejos en óptica viene representado por el infinito, mientras que las demás distancias se representan por la potencia que sería necesaria para poder enfocar en ese punto, y se relacionan de forma inversa:
- Enfocar al infinito es gratis, cuesta 0.
- Si quieres enfocar a un metro, necesitas una dioptría. (1/1 = 1D)
- Si miras a medio metro, hacen falta 2 dioptrías. (1/0.5 = 2D)
- A 33cm serían 3 dioptrías y así consecutivamente. (1/0.33 = 3D)
Estoy usando una fórmula del tipo:
1/d = D
Donde d es la distancia en metros.
Mientras que D representa las dioptrías necesarias a esa distancia.
Si has sobrevivido hasta este punto, ya te debes imaginar que la acomodación es la capacidad que tiene el ojo para poder variar su enfoque entre un objeto cercano y uno lejano.
También que para poder ver de cerca se usa la potencia «variable» del cristalino, mientras que para ver de lejos no se requiere más potencia que la de la córnea.
Explicación en vídeo de la acomodación del ojo
Muchas gracias por aguantar hasta el final, sé que no son conceptos fáciles y que a menudo es necesario leer el texto varias veces para comprender lo que quieren decir las palabras y no el sentido estricto de lo que dicen las frases.
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